domingo, 2 de julio de 2017

La Permacultura, El arte de la cultura permanente

La permacultura, El arte de la cultura permanente


La permacultura es un concepto que nace en Australia a finales de la década de los 70. Esta idea busca agrupar una serie de creencias, principios, y actitudes encaminadas a construir un sistema de desarrollo sostenible, responsable con el medio ambiente y a su vez responsable con la satisfacción de las incesantes necesidades humanas.

La permacultura nace, por un lado, de los problemas ambientales generados por las prácticas agrarias tradicionales (que, en su afán de satisfacer las necesidades y ante un crecimiento demográfico mundial acelerado han generado grandes impactos en los ecosistemas), y por otro lado busca luchar contra ese radicalismo con el que ciertos grupos ecologistas han buscado mantener el medioambiente y han rechazado todo tipo de iniciativas que busquen la seguridad alimentaria, cuando estas iniciativas toman una supuesta mayor importancia al ser humano por sobre la naturaleza, desconociendo que nosotros somos parte de la misma. En ese sentido las prácticas que comprende la permacultura buscan satisfacer necesidades sin menoscabar el medioambiente, cosa que parece complicada pero que es posible.

Quienes defienden los principios que engloba la permacultura están conscientes de que muchas veces la agricultura no se ha practicado de forma sostenible, no se han cuidado los ecosistemas, los problemas de erosión y de desgaste del suelo han aumentado, se ha venido usando plaguicidas y fertilizantes de forma irresponsable, en fin, son tantas las practicas humanas que destruyen el ecosistema y generan ciertos problemas a corto plazo y fatales consecuencias a largo plazo. La deforestación y la tala indiscriminada de árboles son otros ejemplos de prácticas que perjudican la conservación de la biosfera e impiden el desarrollo de la permacultura como alternativa viable a esta problemática. Además, tenemos que, con los avances de la biotecnología y el desarrollo de alimentos transgénicos en pos de buscar eficiencia en la producción de alimentos se cae en iguales o peores efectos medioambientales que con la agricultura tradicional.

La permacultura se basa en 3 principios de los cuales se desprenden otros, se los agrupa en el diagrama de una flor. En el Centro tenemos los principios que son: 1. Cuidar a la tierra. 2. Cuidar a las personas y 3. Repartir justamente los excedentes.  En lo que a cuidar a las personas se refiere tenemos dos pétalos, en el uno está la salud y el bienestar y en el otro la educación y la cultura. En lo que a cuidar la tierra se refiere tenemos tres pétalos, el uno se refiere a construcción, el otro al uso adecuado de las herramientas y la tecnología, y el ultimo, al uso adecuado de los recursos naturales y el cuidado del medioambiente. En lo que a repartición justa se refiere tenemos los pétalos de la propiedad de la tierra y el gobierno comunitario, y el pétalo de una nueva concepción de la economía.

    En este gráfico podemos ver lo antedicho claramente. Cada uno de estos pétalos es importante para desarrollar el concepto de la permacultura y poder aplicarlo. Desde diversas ramas del cono- cimiento y con la ayuda de pro- fesionales de todas las áreas se puede lograr el desarrollo de un modelo sostenible, eficiente y justo. Si recorremos uno a uno los pétalos podemos demostrar esto y ver qué acciones podemos hacer nosotros desde nuestros espacios, desde nuestras condiciones, como estudiantes, como profesio- nales, como habitantes de grandes ciudades o como pobladores de zonas rurales.

Si nos detenemos en el pétalo de la salud y el bienestar vemos que son muchas las medidas que se pueden llevar a cabo, por una parte, desde nuestros hogares y comunidades preocuparnos por nuestros familiares, por nuestros vecinos y promover estilos de vida saludables. También, desde los espacios de decisión política y organizados como sociedad civil, promover sistemas de salud en que la medicina preventiva tenga un mayor protagonismo, buscar que el acceso a la salud este diversificado por todo el territorio y promover políticas públicas encaminadas a mejorar los sistemas de atención médica infantil y a poner el desarrollo infantil íntegro como prioridad. Todas estas medidas ahorrarían ingentes cantidades de dinero que podrían emplearse en mejorar los sistemas educativos. La educación y cultura corresponde el segundo pétalo y en esta cuestión es mucho que falta por hacer en los países latinoamericanos. Después de la salud, la educación es el elemento más fundamental para el desarrollo de los países. Después de tener ciudadanos sanos es necesario tener ciudadanos capacitados, productivos, y no solo productivos, económicamente hablando, sino de muchas formas, el arte, la cultura, la ciencia, la tecnología y todo lo que ayude al país a crecer de una u otra manera.

Luego viene el pétalo de las herramientas y la tecnología. En esta cuestión la Permacultura lo que busca es que tanto las herramientas y la tecnología se usen en pos de mejorar la calidad de vida de las personas y siempre en armonía con los principios básicos. Este pétalo se relaciona directamente con el de la construcción y el del uso adecuado de los recursos naturales. Pues en la construcción se lo puede aplicar con el uso de materiales no contaminantes y mediante la construcción de estructuras antisísmicas y a prueba de desastres naturales. Y en el de los recursos naturales se aplica ya que la tecnología y con el uso de paneles solares, molinos de viento, y de más elementos, pueden ayudarnos a usar en mayor medida formas alternativas de energía, solucionando los problemas de desabastecimiento que se generan cuando los recursos energéticos no renovables no son capaces de satisfacer la tasa de consumo.

Luego podríamos detenernos en el pétalo de la propiedad de la tierra y el gobierno comunitario. En lo que se refiere a la tenencia de la tierra se puede promover verdaderas reformas agrarias en la que los grandes latifundistas remplacen a pequeños productores y agricultores que quieran trabajan la tierra. El adecuado aprovechamiento del espacio y cargas impositivas a las tierras improductivas también son medidas que deberían analizarse. El gobierno comunitario también es necesario para que todos quienes vivan en las comunidades y quienes se vean afectados en determinadas medidas decidan que hacer, y busquen un punto en el que todos salgan beneficiados. En las ciudades y desde los espacios de decisión política promover un sistema de democracia directa y de participación activa desde los ciudadanos y para ellos. Dentro de este pétalo y como iniciativas comunitarias se podrían tomar en cuenta la formación de eco-aldeas autosustentables, que usen métodos orgánicos de producción y donde se practiquen los principios de la permacultura.
Finalmente tenemos como último pétalo, la economía. Pero no concebida desde la perspectiva de la teoría económica ortodoxa. Muchas veces los economistas nos hablan de crecimiento económico, de aumentar la producción, de aumentar la inversión extranjera, de subir el PIB. Y dejan de lado cuestiones como la calidad de vida, el desarrollo humano, la equidad, la justicia. Para entender a lo que se refiere otra concepción de la economía me permito exponer los cinco principios que según Manfred Max Neef corresponden a la nueva forma de ver la economía: 
  1. La economía está para servir a las personas y no las personas para servir a la economía.
  2. Desarrollo tiene que ver con personas y no con objetos.
  3. Crecimiento y desarrollo son dos cosas distintas y el desarrollo no precisa necesariamente crecimiento.
  4. Ningún proceso económico puede ocurrir al margen de los servicios que prestan los ecosistemas.
  5. La economía es un subsistema de un sistema mayor finito y cerrado, que es la biosfera
Este economista después de postular los 5 principios dice “En consecuencia, el crecimiento permanente es una imposibilidad. Y el principio valórico fundamental, el que sustenta la economía que a mí me gustaría, es que bajo ninguna circunstancia y bajo ninguna consideración, un interés económico o proceso económico puede estar por encima de la reverencia por la vida."
 
La permacultura, así como otras iniciativas que ayudan a buscar estilos de vida sostenibles y modelos de desarrollo con responsabilidad social están tomando fuerza en todo el mundo. Hoy con la crisis económica que vivimos, y con los conflictos armados y políticos que se están generando en este y el otro lado del mundo, cambiar de perspectivas y promover otras formas de relacionarnos resultan muy necesarias y fundamentales para no destruir nuestra casa, nuestro planeta, sino que es muy importante cuidarlo, y cuidarnos unos a otros, como hermanos, como amigos, como habitantes eternos de la tierra...